Cuando el amor condiciona
Cuando el amor condiciona, duele. Sientes que el corazón se parte en dos, notas como un cuchillo que entra y sale de él.
Cuando amas mucho sientes el corazón más grande.
Cuando piensas en tu amor sientes esas mariposas en el estómago.
Cuando eres hijo sientes a tus padres muy especiales.
Cuando tienes un hijo, lo miras como algo especial, y piensas de otra forma en tus padres.
Cuando el amor no es incondicional hemos de buscar en donde está el error, el apego quizás, el que nos creamos dueños de lo que amamos.
Cuando el amor duele, es entonces cuando tenemos que trabajar duro para salir a flote, para evolucionar, para crecer.
El Reiki al final es la solución a todos los problemas, no hay nada que no sane el Reiki, sobre todo cuando amamos de verdad, porque entendemos que, entre otras cosas, ese amor llegará de nuevo en el momento oportuno de nuestras vidas, cuando el universo crea que es nuestro momento de nuevo, así pasen una, dos o tres vidas. Pero ese amor volverá a uno.
Quedará como asunto pendiente, mientras nosotros evolucionaremos para merecerlo.