Conversando con… Almudena Fernández Miguel, madre, esposa, triatleta, voluntaria…
Conversando con… Almudena Fernández Miguel, madre, esposa, triatleta (ha terminado algunos Ironman), voluntaria y muy buena amiga. Almudena es algo más que una mujer de hierro, es una supermujer. Nos conocimos en el mundo de las carreras. Hemos compartido kilómetros de conversaciones profundas. Su fortaleza invita a creer que todo es posible, y lo es si lo haces con todo el amor que se puede tener a uno mismo, cosa que a veces es complicado.
IMO: ¿Es difícil mantener el equilibrio?
Almudena: El deporte me ayuda a mantenerme cuerda.
IMO: ¿Estás entrenando para algo ahora?
Almudena: Nada en especial, me gusta mucho correr por la naturaleza, no concibo la vida sin sentir la naturaleza.
IMO: Solo te falta correr descalza.
Almudena: Je, je, je. Eso ya… no sé yo. De momento no…no lo veo.
IMO: Prueba un día un paseo por la naturaleza sin zapatillas…
Almudena: Lo probaré.
IMO: Y abraza un árbol descalza…
Almudena: Abrazar un árbol lo hice un día y me acordé muchísimo de ti. Me lo dijiste hace tiempo y sí que lo hice.
IMO: Pues ya me dirás cuando hagas la prueba del paseo descalza por la montaña. ¿Cómo estás ahora? ¿Cómo te sientes?
Almudena: ¡Feliz como una perdiz! He cambiado de vida totalmente. Ahora estoy trabajando en Cruz Roja donde también hago voluntariado. Me gustaba mucho ayudar a la gente y por fin lo he conseguido. He estudiado Técnico en Emergencias Sanitarias con la Cruz roja, ha sido difícil compaginar trabajo, entrenamientos y vida familiar pero se ha conseguido. En verdad ha sido difícil pero fácil…
IMO: Es como si el Universo te hubiese preparado para que cumplieses tu plan de vida en este momento, en este justo momento en el que estás preparada para todo lo que viene.
Almudena: Así lo siento, y ahora me estoy preparando para poder estudiar enfermería lo antes posible, un gran sueño que nunca lo había podido estudiar por circunstancias pero sabiendo esperar se cumplen los sueños.
IMO: Sabiendo esperar se cumplen los sueños, lo que ocurre es que muchas veces los olvidamos.
Almudena: Lo mío es vocacional y ese sueño ha estado ahí macerando. Estoy tan ilusionada.
IMO: Es tan importante vivir con esa ilusión que te empuja a hacer las cosas… Cuéntanos una experiencia de voluntariado que te haya marcado la vida.
Almudena: Pues en la ambulancia, la simple atención al paciente, agarrarles las manos, escucharles, hablarles para que se relajen…
IMO: La escucha activa y el habla amorosa.
Almudena: Es muy gratificante. Una vez que llegamos al hospital y una señora me abraza y no me soltaba. ¿Te vas a quedar conmigo? ¿Vas a venir a verme?
IMO: Eso que haces es como yo considero que es el Reiki. Amar sin condiciones, sin esperar nada a cambio. Sin esperar la curación porque al final hay una emoción que se sana.
Almudena: Me pasó una vez que fuimos a por un señor, le llevamos al hospital. Me decía que de los incesantes e insoportables picores que sentía, estuvo a punto de tirarse por el balcón. Cuando llegamos al hospital se volvió a rascar y le dije “¿Te has fijado que no te has rascado en todo el trayecto de tu casa hasta aquí?”.
IMO: Fijó su atención en otra cosa y se olvido del “come, come”, del picazón que le carcome…
Almudena: Esto es muy bonito. Ahora estoy con violencia de género y tele-asistencia. Muy hermoso pero muy duro. En cuanto al maltrato, al menos saben que tienen un lugar a dónde acudir y a los ancianos les prestamos asistencia telefónica, les atendemos, muchas veces solo se trata de escucharles y si lo precisan les enviamos la ayuda necesaria.
IMO: ¿Hay muchos abuelillos solos?
Almudena: Muchos, muchos
IMO: ¿Sabes que para algunos ancianillos tú eres un ángel?
Almudena: Sí, hablas con ellos y me doy cuenta de ello.
IMO: Si los ángeles se encarnaran en humanos, lo harían en forma de voluntarios de Cruz Roja.
Almudena: ¡Qué bonito!
IMO: ¿Qué le dirías a una mujer para que dé el paso y no se deje maltratar más?
Almudena: Que piense en ella. Piensa en ella y en sus hijos. Algunas te dicen que no es malo. Les cuesta mucho salir de ahí.
IMO: ¿Cuánto tiempo llevas haciendo deporte?
Almudena: Yo era superdeportista. Baloncesto desde los ocho años. He hecho escalada…tuve un parón cuando nació mi hija porque no me daba tiempo a nada. Luego me dio un jamacuquillo que digo yo, cuando Carmen tenía cuatro meses, me dio un viaje gordo, una parálisis y me dijeron que no podía hacer deporte, que me tomará la vida con calma. Estuve así 8 años, engordé mogollón. Hasta que un día me miré al espejo y me pregunté: ¿a ti te gusta lo que estás viendo? Y desde ese día volví a hacer deporte. Lo cierto es que iba a un médico que no me dejaba hacer deporte, que me decía que estaba deprimida y me mandaba antidepresivos. Siempre me decía que estaba fatal y así ¿cómo no voy a estar deprimida?
IMO: Entonces un buen día te miraste al espejo y fuiste consciente de que lo que veías, como vivías, no te gustaba.
Almudena: Y empecé a dejar de tomar la medicación progresivamente, porque no se puede dejar de tomar de golpe, y volví a hacer deporte.
IMO: Para mí, eres un ejemplo a seguir. Por eso quería que compartieses tus pensamientos con otras personas. Tras una prueba durísima de Triatlón llegas con una sonrisa a la meta.
Almudena: Por muy dura que sea la prueba, si no eres capaz de disfrutar y de llegar con una sonrisa, para mí, no hubiese valido la pena el esfuerzo.
IMO: Una prueba de triatlón es de superhéroes.
Almudena: Forma parte de mi vida.
IMO: ¿Eres competitiva?
Almudena: Compito conmigo misma. La gente que hacemos deporte a este nivel, que hacemos estos esfuerzos, tenemos mucha capacidad de resilencia.
IMO: Y disfrutas.
Almudena: Disfruto muchísimo.
IMO: ¿Meditas?
Almudena: Soy muy nerviosa, no medito como tal pero si medito cuando nado, corro o monto en bici. Estoy conmigo misma.
IMO: ¿Qué te gusta más correr, nadar o montar en bicicleta?
Almudena: Buff, no sé. Me gusta mucho correr por montaña. Hacer las tres cosas seguidas me gusta mucho. Empezar nadando en aguas abiertas, recuerdo el Ironman de Huelva, el amanecer en el Atlántico, una playa, fue una sensación brutal, luchando contra las corrientes; continúas montando en bicicleta y terminar corriendo…
IMO: Recuérdanos las distancias de un Ironman.
Almudena: 3´800 kms. nadando, 180 kms. de bicicleta y un maratón corriendo, 42 kilómetros.
IMO: Si pudieses volver al pasado y encontrarte con la pequeña Almudena de 14 años ¿Qué consejo te darías?
Almudena: Aunque te digna que estudies otra cosa que estudies lo que quieras. Habría hecho muchas cosas distintas y muchas cosas igual, pero hubiese estudiado enfermería.
IMO: Dinos un libro que te haya cambiado la vida
Almudena: Me gustó mucho Crónicas marcianas de Ray Bradbury y Ensayo sobre la ceguera de José Saramago, me dejó muy tocada.
IMO: ¿Y una película?
Almudena: El otro día vi Campeones, te la recomiendo.
IMO: La veremos. Muchas gracias por compartir tanto con el mundo.
Almudena: De nada.
IMO: No nos lo queremos perder.
Y nos despedimos de un fuerte abrazo de esos que dejan huella en el corazón, como su sonrisa.