Correr la 12 Carrera Liberty con causa: dar visibilidad al LUPUS
Jose Mª Escudero Ramos. Madrid, 20 de mayo de 2019
La Liberty se ha convertido en un clásico. Doce ediciones ya y parece que fue ayer cuando corríamos la primera.
Este año ha sido especial porque hemos corrido por la Asociación Madrileña de Lupus, AMELyA, para dar visibilidad a la enfermedad. Todo ello ha sido posible gracias al Comité Paraolímpico Español y al esfuerzo de las voluntarias de la asociación que se han currado de una manera excepcional la difusión de la carrera, las inscripciones y la entrega de dorsales.
Han conseguido sus objetivos y todos los que estábamos allí con nuestra gorra de AMELyA disfrutamos de una estupenda mañana de carrera con tinte solidario. Nos gusta correr, somos solidarios, no podemos ser más felices cuando unimos las dos cosas.
AMELyA ha conseguido juntar a 29 corredores para la carrera de 10 kilómetros, 12 a las de niños y 117 a la de 3 kilómetros. Casi 160 personas unidos en una gran fiesta del atletismo por una noble causa, dar a conocer una enfermedad como es el Lupus.
Recuerdo que Blanca me comentó hace tiempo que en un episodio de la serie House, el doctor con su peculiar vehemencia, se dedicó a decir a voz en grito que su paciente del día tenía “lupus, lupus, lupus”. Blanca siguió su relato comentando que muchas personas llamaron a la asociación para que se denunciase a la cadena de televisión y a la serie. Blanca, viendo más allá de la ofensa respondía a todas esas personas indignadas lo mismo: denunciar no, tenemos que agradecer que nos está haciendo la mejor difusión. A partir de ese episodio muchas personas empezaron a conocer esta enfermedad que consiste en que las células buenas creen que otras células buenas son malas y se defienden atacando a esas mismas células buenas, así como Plauto escribió en su obra Asinaria “Homo Hominis Lupus Set”, el hombre es un lobo para el hombre, se dice que las células son lobos para las células. El Lupus es una enfermedad rara autoinmune. Yo no soy ningún experto pero sé que una de las características comunes es esa mancha roja con forma de mariposa que aparece en las mejillas de quien vive con la enfermedad, por eso el logo de AMELyA es una mariposa. Otra característica de casi todos los pacientes es ese cansancio que sienten, sobretodo tras días de mucho movimiento, por eso es de agradecer todo lo que han hecho por esta carrera y todo lo que hacen las voluntarias de la asociación para dar a conocer el Lupus y para ayudar a quien lo necesite y siempre con una sonrisa. Son un ejemplo a seguir. Son ese tipo de personas que desde la discreción hacen un mundo muy amable. Luchan por mejorar su calidad de vida y de las personas que viven acompañadas de un lobo, del LUPUS.
AMELyA me ofreció la posibilidad de invitar a amigos corredores así que compartí en algunos grupos de colegas y nos llegamos a apuntar cinco del gran grupo de corredores, liderado por Raúl, Machacas en acción. Disfrutamos mucho, la verdad.
De la carrera, decir que aprovechamos para correr por un compañero que está pasando un proceso evolutivo intenso, Miguel estuvo con nosotros, en nuestra mente y en nuestros corazones, seguro que le llegó nuestra energía.
Corrimos juntos Luis Briones, cofundador de la Asociación Susurros de luz, Manuel Fernández y yo a un ritmo muy bueno para mí y muy lento para Luis, pero es que la amistad hace que Luis tire de mí en más de una ocasión, al igual que Fernández. Corrimos y reímos hasta el punto que Luis me dijo “si puedes hablar, puedes correr más rápido”…que presión, jeje, aunque esta carrera, por la cantidad de gente que atrae, no es la mejor para hacer buena marca porque no se puede adelantar bien, hay algún que otro embudo, cambios de ritmo, etc. es de las que haces para disfrutar y más si corres con causa.
También nos vimos con un buen grupo de machacas antes y después de la carrera, comparto las fotos que lo testifican. Bueno, del post saboreando un aperitivo no hay pruebas gráficas, estábamos muy ocupados saboreando una estupenda tortilla de patatas.
Quiero hacer patente mi gratitud a AMELyA y las bellas personas que forman esta asociación tan implicada en la ayuda a todos los que viven con el lobo, ya sean pacientes o familiares.
A nivel personal decir que tres días antes de la carrera me han diagnosticado una curiosa anemia, quiero creer que los resultados de los análisis han dado error por habérmelos hecho tras el maratón y el camino ignaciano que hice posteriormente pero una falta de hierro viene de más atrás, el esfuerzo puede alterar un poco, pero no tanto, los resultados.
Tras meditar decido NO continuar con el Reto 100 km 24 H PyEs, no voy a correr la 100 24 del 8 de junio, el esfuerzo que requiere hacer cien kilómetros no me vale la pena, aunque tenga 24 horas para terminar, la carencia de hierro en sangre hace que no oxigene bien y hacer el reto para poder ir a Paraguay, dejarme la sangre y el aliento en este proyecto de esta forma no es sano ni coherente, el Universo me ha dado un aviso. Me he de poner las pilas y hacer meditaciones solidarias y cuenta cuentos para poder conseguir fondos y hacer todo lo que podamos en España y en Paraguay con nuestra asociación Susurros de Luz.
A pesar de esa decisión comento con amigos lo de la anemia y una persona me dice que tiene anemia crónica de toda la vida y no ha dejado de hacer deporte, otra que si hay una falsa anemia del corredor…total que me planteo hacer la versión pequeña de la 100 24, la de 35 kilómetros, carrera que ya he hecho en dos ocasiones y que me encanta…y va el Universo y me da otro aviso: Jugando con mi hija me hago un esguince unas horas después de la carrera. Si no escuchas los mensajes en versión susurro, el Universo te da una colleja, así que tras darme reiki, por insistencia de mi hija María, la pobre estaba sufriendo porque se sentía culpable, fuimos a Urgencias. Diagnóstico: Leve esguince, reposo deportivo.
No hay culpa, en todo caso responsabilidad. Yo soy responsable de lo que me ha pasado y a mi hija María he de dar las gracias por hacer de hermosa herramienta para que yo, terco de mí, entienda cada mensaje que el Universo me susurra, ¿no es para estar agradecido?
Pues eso: Gracias, gracias, gracias.
Ayy Jose, cuánto me alegra, iba a decir de que el universo te haya dado esos avisos, pero no, él siempre los da. Me alegra infinito que los hayas escuchado. Jajaja, que alegría más rara, que me alegre de tu anemia y tu esguince. Pues sí, gracias infinitas, más que nada por la «terquedad» que dices. Bendito Universo.
En cuanto a la crónica de la carrera, me has hecho reír. Qué amigos más fabulosos tienes, qué bonito.
También decirte, gracias por la causa por la que has, habéis, corrido. Una de mis hermanas tiene lupus. Millones de gracias a todos.