Haciendo Memoria
Mientras que terminamos los papeleos y la burocracia para tener todo preparado para próxima la Asamblea de socios, hacemos memoria y queremos compartirla.
Susurros de luz se destaca por hacer que las cosas pasen. ¿Por qué? Porque no queremos ser protagonistas, queremos ser ejemplo. De esta forma, hacemos las cosas de una manera sencilla, lo contamos de una forma bonita y animamos a que las personas que nos ven, nos leen y nos siguen en redes saquen lo mejor de ellos mismos.
La asociación sin fines de lucro Susurros de luz comenzó repartiendo cenas a las personas que viven en la calle. En realidad fue el fundador, una nochebuena y una mujer que estaba en la calle pidiendo que preguntó «¿Por qué sales hoy y no otra noche?», «Porque hoy tú me ayudas a mí, mi alternativa era quedarme en casa llorando porque es mi primera nochebuena recién divorciado». Respondió. Ahora son 15 voluntarios y cientos de personas que reciben la atención de voluntarios, cooperantes y donantes.
Durante 2019 nuestras actividades se han desarrollado en Madrid, Castellón y Paraguay especialmente.
En Paraguay hemos actuado en colaboración con la Fundación de exalumnas de la escuela teresiana de Asunción en la Chacarita en Asunción y en el Colegio San Enrique de Ossó en Limpio. Hemos impartido Talleres de gestión de emociones para familias de la Chacarita (barrio desafortunado de Asunción), hemos realizado diversos talleres de nutrición (comer frutas y verduras) en la Escuelita de la Fundación de exalumnas, y de abrazoterapia para niños, niñas y docentes tanto en Asunción como en Limpio. También hemos hecho charlas motivacionales y Talleres de oratoria en el Centro Educativo San Enrique de Ossó en Limpio para diferentes tipos de edades. Y para estudiantes de 14 a 18 años hemos hecho un taller creado por el fundador Jose M.ª Escudero Ramos, Mindfulness con una mirada fotográfica en este centro educativo. Hemos creado un Club de fotografía SEO en ese mismo colegio y conseguimos que los alumnos, que nunca habían estado en Asunción estando a solo 20 kms, pudieran exponer un trabajo fotográfico titulado Razones para ser feliz: Paraguay. Así motivamos a los estudiantes para que puedan considerar la fotografía como un arte, ellos son artistas, expusieron en varios lugares de Madrid durante el año, y en el Centro Cultural La Manzana de la Riviera de Asunción.
También hemos hecho una serie de vídeos de motivación para docentes y estudiantes del Centro Educativo San Enrique de Ossó.
Hemos realizado talleres de motivación para socias de la Fundación de exalumnas de la Escuela Teresiana de Asunción.
Hemos donado pañales y ropa al Hospital de indígenas de Limpio y hemos equipado con material sanitario al Centro de Salud de los Maká.
También creamos varias bibliotecas, impartimos lecturas en un comedor social, El kiosco solidario dimos talleres de Meditación y narrativa en el Centro penitenciario Casa de buen Pastor en Asunción, del cual salieron unos hermosos relatos que pronto se publicaran en un libro.
En España hemos colaborado con la Fundación Inmunes, Asociación AMELyA o Namasté la Plana impartiendo conferencias, creando retos deportivos para dar a conocer proyectos o las mismas fundaciones y organizando Kedadas de abrazos, esto es hacer carteles pidiendo abrazos y salir a la calle a que las personas que se cruzan con nosotros tengan a bien abrir brazos y corazones para que salga de su interior lo que tenga que ser. Hacemos estas Kedadas de abrazos en plazas, calles y en las proximidades de hospitales como La Paz, el Doce de Octubre en Madrid y el Provincial en Castellón. ¿Por qué en hospitales? Por lo que hemos podido averiguar, las personas que van a los hospitales un sábado por la mañana o por la tarde (antes de la pandemia) suelen ser personas que tienen un familiar enfermo. Van siempre con prisas y no tienen tiempo para desahogarse ni llorar. El abrazo es la escusa perfecta para preguntar ¿A quién vienes a ver?¿Quieres contarme algo? Y así hemos podido aplicar la “agoraterapia” (terapia de escucha amorosa en espacios abiertos).
Salimos con frecuencia a repartir cenas entre las personas que viven en la calle. Aprovechamos la excusa de las cenas para escuchar la historia que cada persona tiene detrás de sí. En San Antón pudimos hacer talleres de oratoria y narrativa, fuimos durante los últimos meses de 2019 y los primeros de 2020. Fruto de estos talleres se publicará el libro que mencionamos en el apartado de Centro penitenciario de Asunción.
En 2020, Comenzamos el año yendo a escuchar historias en el Taller de oratoria que hacíamos allí con las personas sin hogar. Podemos contar que dos usuarios de San Antón, una mujer y un hombre que en esa época no tenían techo bajo el cual dormir, se vinieron con nosotros una noche a repartir cenas entre las personas que viven en la calle. Toda una experiencia fue hacer que dos sin techo se viniesen con nosotros a atender a los Sin Techo. Fue preciosa.
Lo cierto es que el confinamiento y la pandemia truncaron toda expectativa.
Nada más empezar el toque de queda nos unimos a la ayuda que Dragones de Lavapies llevaba a cabo en las calles de barrio.
Salimos a dar cenas en pleno confinamiento y la policía secreta nos avisó que teníamos que tener un Salvoconducto de la Comunidad de Madrid. Lo bueno es que Susurros de luz está dada de alta en la Comunidad de Madrid, Subdirección del voluntariado, y nos lo dieron sin dudar. Esto y unas buenas donaciones nos permitieron salir todo el año. Repartimos cenas, desayunos, escuchábamos. Todo durante el confinamiento.
Pusimos a disposición de toda aquella persona que lo necesitase un número de teléfono. Compartimos meditaciones diarias vía WhasApp para ayudar a pasar los difíciles momentos que se estaban viviendo.
Para después de verano, finales de agosto, comenzamos a ir todos los miércoles a dar desayunos, kits de aseo, ropa, libros, sacos de dormir, calzado, a las personas Sin Techo que se vienen a duchar. También les pagamos la ducha.
Además estamos desarrollando el taller Razones para que suba la adrenalina (basado en Razones para ser feliz) entre nuestros amigos de la calle.
Seguimos con las meditaciones, una vez a la semana y queremos desarrollar talleres de Arteterapia para sanitarios, o personas sin recursos que lo necesiten. Taller de Escritura Meditativa y Mindfulness con una mirada fotográfica.
Tenemos en proyecto talleres para el fomento de la lectura y seguiremos organizando Maratones de terapias energéticas para conseguir fondos para otras asociaciones afines.
Además, publicamos online la Revista Susurros de luz a través de la cual difundimos el pensamiento positivo y la acción, el pensamiento crítico y la capacidad de discernimiento. Para que no quede todo en un pensamiento, aunque sea positivo. Vivir en coherencia con lo que somos: Amor.
-Seguimos becando a niños y niñas del Centro de Estudios San Enrique de Ossó en Limpio.
Seguimos conectados con las asociaciones con las que cooperamos en Paraguay y seguimos aportando asesoramiento, talleres online o lo que necesiten en determinados momentos.
-Las meditaciones de todos los jueves por la noche del que se ven beneficiados alrededor de un mínimo de 40 personas por semana (hay 38 personas apuntadas en los grupos de Telegram y WhastApp pero se comparte y se hace en diferentes grupos) .
-Cada miércoles estamos atendiendo de media a 50 personas, dando desayunos y kits de aseo y tickets de ducha.
-Repartimos caldos, cafés, zumos, fruta y libros por las calles de Madrid cada tres semanas aproximadamente. Atendemos en cada salida al menos a 30 personas.
-Escribimos y difundimos a lo largo del año decenas de Editoriales, reseñas de libros, artículos sobre nuestras acciones, compartimos experiencias y pensamientos que ayudan a cientos de lectores.
-Y ayudamos a decenas de colaboradores, donantes y voluntarios a que tengan razones para creer en la humanidad siendo participes de la acción positiva hacia el prójimo.
Si tuviésemos más posibilidades monetarias, más recursos económicos y un local, no tendríamos fin. Tenemos muchas ideas, muchos proyectos que sacaremos adelante tarde o temprano.
Somos optimistas por principio, y muy agradecidos. Así que muchas gracias por hacer que las cosas puedan pasar.