¿Por qué escribimos?

23 de abril de 2019. Asunción, Viladecans, Madrid.

Se nos ha ocurrido escribir, por el Día del libro 2019, un artículo a tres voces entre Desam, Micaela y Jose para compartir nuestras razones de por qué escribimos con nuestros lectores.

Tres textos muy diferentes unidos por esas ganas de transmitir nuestras experiencias.

Feliz Día del libro.

¿Qué por qué escribo? por Desam. Ferrández Domenech, redactora de la Revista Susurros de luz.

Pues en principio por necesidad. Porque hay una voz insistente que me dicta las palabras, no sé de dónde salen, ni por qué, solo sé que me susurra bonito. También es cierto que si no escribo la primera frase y la dejo para luego, no soy capaz de recordar lo que me dijo y pierdo la inspiración, como muchas veces ya me ha sucedido. Por eso ahora, cuando me susurra por la calle, lo grabo por audio en el móvil para escribirlo en cuanto pueda.

En segundo lugar por puro placer. A veces tengo un montón de palabras en la cabeza después de un acontecimiento, cosas que quiero contar, sin embargo por la emoción hay un caos total, las arrojo sobre el papel como salen, después las organizo, quedando un párrafo bonito. Me agrada enormemente escribir las experiencias hermosas, para recordarlas, ya que con el tiempo te olvidas un poco de ellas.

En tercer lugar, otra vez por necesidad. Hay veces que me suceden cosas y las necesito expresar, aunque no lo comparta y se quede en mi zona privada. Sin embargo, al plasmar las situaciones en palabras me sirve para liberar esa energía, esa emoción, que quizás no sé ni como gestionar. Esta emoción sale del cuerpo, de la mente, de la garganta, de esa verborrea incesante que a veces es hasta asfixiante, cuando te enredas en tu bucle y no sabes salir de ahí. Así que lo escribo, lo plasmo y es como un desahogo, un soltar, desapareciendo el bucle que simplemente se va, se ha liberado la emoción.

En cuarto lugar, otra vez por puro placer. Cuando describo cosas y las comparto con la gente con la que he vivido dicha experiencia, o simplemente lo escribo porque a mí me ha agradado, las respuestas que después recibo son muy lindas, expresiones de amor de los seres que lo han leído. Esto me sube el ego, me sube la autoestima, me siento bien y es como ¡¡guuaauuu!! ¡¡QUÉ BONITO!! No ya lo que yo escribo, si no lo que me escriben, la respuesta que ha dado la gente, ese reconocimiento por mis palabras o por mi forma de expresar.

En quinto lugar, por cautivar. Para mí, es una forma de agradecer a una persona, o a varias, que de cara a cara con un “gracias” me parece que se queda corto. Es una manera de agradecer más amplia, así cautivo compartiendo esa emoción que yo he sentido en un momento, gracias a los corazones que me rodean.

¿Por qué escribes? por Micaela Serrano Quesada, Poeta y escritora.

Cuando tenía alrededor de catorce años, empecé a escribir mis primeros versos. Tenían un aire romántico y la influencia principal de mis poetas preferidos de aquel momento: Gustavo Adolfo Bécquer, Antonio Machado y Juan Ramón Jiménez. Recuerdo que gané un concurso de poesía en el Instituto y ese momento lo he inmortalizado como uno de los mejores de mi vida ya que por fin había conseguido un pequeño triunfo en el mundo de las letras.

Luego crecí y casi siempre la poesía me acompañaba en mis viajes. Cursé Filología Hispánica porque siempre he amado la literatura y mi sueño era convertirme en una gran escritora.

Con los años, he comprobado que ese sueño sigue persistiendo en mis células, pero no tanto para conseguir el éxito o la fama, sino por la necesidad de comunicarme con el lector y de disfrutar realizando una tarea que siempre me ha gustado.

Todas las experiencias de mi vida me han conducido al momento en que me encuentro ahora. Ha habido una evolución importante desde mi adolescencia hasta la edad actual y las letras me han ayudado a equilibrar cada uno de esos momentos. Empecé escribiendo poemas, sigo haciéndolo, pero al mismo tiempo tomé el rumbo de la novela, una novela que invita a la reflexión acerca de la vida, a conocernos como seres llenos de Luz, libres y poderosos. Una novela que ayuda a despertar conciencias, como es el caso de “El abrazo de los girasoles”.

Escribir es un regalo de Dios, del Universo o de La Fuente, como queramos llamarlo. Un don que he recibido y por el que tengo que trabajar y expresarme día a día. Hace años, una amiga me dijo que mi propósito de vida era escribir y ayudar a los demás con mis palabras. Eso es lo que intento hacer desde entonces, aunque a veces sea una tarea difícil, por carecer de un tiempo precioso y no disponer de todo el que quisiera.

He descubierto en los últimos años que también escribo para conectarme con mi yo interior. Allí buceo dentro y encuentro mi corazón encendido de amor, ávido de sueños y pensamientos que fluyen posteriormente a través de las palabras. En este sentido, se convierte en una labor terapéutica.

La naturaleza también invita a la escritura, pero encuentro inspiración en la calle, en la oficina o en el autobús. Hay que tener los sentidos bien despiertos porque cualquier situación de la vida cotidiana puede ayudarme para redactar una historia.

Por último, escribo para contar alguna de mis experiencias personales, como lo ha sido en mis últimos dos libros, el tema de la enfermedad. Y si consigo ayudar a algunas personas con mis letras, pues me sentiré realmente feliz de haber contribuido a dar servicio a los demás.

Hemos nacido para ser felices, para amarnos a nosotros mismos, a todos los seres vivos que nos rodean y a nuestros hermanos humanos. La mejor manera de serlo es encontrando lo que nos gusta hacer, lo que nos sale de manera fácil, ya sea cantar, escribir, dibujar, hablar en público…En mi caso, es la escritura, por eso no dejaré de escribir mientras pueda.

¿Por qué escribir? por Jose Escudero Ramos, escritor, fotógrafo, arte-terapeuta, director de la Revista Susurros de luz

Hay mucha gente que escribe diarios, poesías y ensayos pero no los enseñan a nadie, lo cual quiere decir que escribir es una gran terapia. Escribir para poner en un papel aquello que te inquieta, que te hace pensar, aquello que te ha gustado, tus secretos, tus sueños, tus metas… Hay tanto por lo que escribir y cada uno lo hace por un motivo diferente.

¿Por qué escribo yo?

Buena pregunta, jejeje, qué voy a decir yo que soy quien ha hecho la pregunta. ¿Por qué escribo? Pues empecé a escribir desde pequeño, ya en el colegio en vez de exámenes escribía cuentos o ensayos. Escribía sentimientos, algunos rotos, destrozados, esos que se escriben en la adolescencia rebelde, la que no entiende su mundo.

Para mí escribir era, es, una válvula de escape. Mi madre leía todo lo que escribía y como buena madre, tenía palabras bellas para cada texto que leía.

Ahora escribo porque tengo un don, comunico muy bien, soy sensible y creo que gustan mis escritos. Me llena cuando me dicen que mi último libro ¿Por qué decimos mindfulness cuando queremos decir meditación? gusta, que ayuda a mis lectores.

Esa es la mejor recompensa.

Por eso la siguiente pregunta que quería hacer es, ya que escribes ¿Por qué compartirlo?

Pues porque ya que está escrito, que menos que compartir. Si las experiencias, vivencias y pensamientos de uno pueden ayudar a más personas, es un “pecado” no compartirlos. Me encanta escribir. Disfruto tanto…

La siguiente pregunta que hago a los lectores es esta:

¿Por qué leer?

Pues para mí leer es vivir mil vidas, como escribir también es crear un héroe, un Alter Ego, un personaje, historias, realidades…

Escribir es dar la posibilidad a otras personas de que sientan, vivan, reflexionen…leer es lo mismo, es vivir, sentir, reflexionar, aprender, amar…

¿Qué tipo de lectura te gusta?

A mí la que me entretiene y me hace pensar, la que me enseña, la espiritual, la metafísica, la que plantea cuestiones… ¡ah! Y las biografías. Me encanta conocer relatos de superación personal. La historia del mundo está llena de historias de personas tan normales como tú y como yo que han aprovechado su don para hacer de lo cotidiano algo extraordinario.

No entendería mi vida sin la escritura, sin la lectura, sin la música, las canciones tienen letras que hay que escribir, ¿Os imagináis una vida sin películas? Hay que escribir guiones… la escritura es más importante de lo que pensamos y ¿cómo aprendemos? Leyendo más.

Gracias, escritores, por compartir, por crear, por amarnos tanto que nos dais algo tan preciado como vuestra creatividad.

Gracias, compañeros de Revista IMO, ahora Susurros de luz.

Gracias, Desam, gracias, Micaela.

Gracias, lectores.