¿Qué es lo más importante?
PENSAMIENTO COMPARTIDO POR DESAM. FERRÁNDEZ, LIMPIO, PARAGUAY, 1 DE OCTUBRE DE 2018
Amigo, hoy me gustaría que me dijeras lo qué es de verdad importante.
Ahora me paso el día feliz y me doy cuenta de que cada vez estoy más presente en lo que hago, sí, mientras estoy viviendo una situación mí cabeza no está elucubrando otra actuación, ni planificando ni proyectando cosas hacia un posible futuro.
¿Será qué al futuro ya no le doy tanta importancia?
Quiero decir, cuando voy al colegio disfruto de los alumnos, juego con ellos, colaboro leyendo en el proyecto “leo”, me dan y doy cariño, a veces hasta pongo cara de risa o de que me han pillado para provocarles interés, Sé que en ese momento estoy totalmente presente, como cuando escucho a los padres y madres, cada uno con su historia y sus pensamientos, experiencias hermosas que me enseñan mucho sobre la fe, y es que aquí la fe se vive de otra manera y me comentan que en el interior del Paraguay, todavía es más fuerte esa fe.
Ayer, durante una conversación, por cierto muy interesante, sobre la fe y los paraguayos, me explicaron que el paraguayo dice que sí a todo por no parecer ignorante, ciertamente a más de una personita he pillado diciéndome que sí a todo para luego, en la siguiente pregunta, darme cuenta de que no me han entendido, pero les sabe mal decir que no me entienden.
Yo creo que preguntar no es de ignorantes aunque confieso que alguna vez también hice eso de decir que sí a pesar de no entender bien la pregunta… qué bueno que vea espejos en ellos, benditos sean.
Tenemos miles de espejos y la pregunta que me hago ahora es ¿todos los humanos ven su sombra reflejada en “el espejo” del prójimo tanto en las erradas como en los aciertos?
Mí sombra real, hoy, es más grande y más hermosa que yo, se aprecian unas pestañas largas y no se ven las arrugas que el paso de la risas han dibujado en mí rostro.
Amigo, todavía no me respondiste.
Ahora que agradezco todas las fobias y miedos trabajados, que convivo con cosas que no me agradan como las goteras encima de mí cama y el olor constante a pozo ciego, ¡esto es tan intenso que tendría que pasarme el día enojada!, sin embargo cuando no me acuerdo de esto y me dedico a vivir, aquello que parecía tan importante pasa ser nimio y hasta poco relevante.
Tengo y disfruto del contraste de mí silencio y de la cháchara, del trabajo y sobre todo estoy maravillándome de todas esas palabras que forman un mar inmenso para que yo pueda elegir la adecuada, como si eligiese una gota perfecta para el océano que estoy creando.
El juego de luces y sombras hacen que me inspire, mientras espero tu respuesta.
Convivo con mil insectos que van y vienen a rachas, sobre todos los mosquitos, que al final me he acostumbrado a matar ya que me devoran con pasión en cuanto me paro, sin importar la vestimenta que lleve ese día, atraviesan hasta el pantalón.
Pero insisto amigo, ¿qué es lo más importante y quién le pone la puntuación, el puntaje?
Para mí, ahora lo más importante, ahora, es la luz para poder ver la danza de la silueta que genera mí sombra, las siguientes cosas más importantes son las lagrimitas dosificadas que salen del señor bolígrafo, aunque quizás mañana lo más importante sea el desayuno… quién sabe, dependerá seguramente de la hora en que me haga la pregunta.
Entonces y ya que tú, amigo, no contestas, me voy a contestar yo.
Lo más importante es estar vivo, y claro dirás ¡obviamente! Pero no me refiero a estar vivo a que el corazón late y todo se mueve, me refiero a estar vivo, a sentir, a no vivir como un autómata dentro de la rutina diaria.
En este instante que los ojitos se cierran y el resto se aletarga, es el momento para dejarme llevar por Morfeo a dónde quiera, descansaré bien para recibir otro día magnífico.
Quizás en este momento, lo más importante, sea apagar la luz y escuchar esa recomendación o dejar de escuchar mis sentidos.
Gracias, amigo, por tu silencio, me ha permitido la comunicación conmigo misma.
Bendiciones y suerte.