Superhéroes, micro cuento
Cuento dedicado, con inmensa gratitud y cariño, a Celia y a la Asociación MEF2C.
Narrador: En un universo paralelo existía un mundo habitado por seres muy sabios.
Un día un niño preguntó:
Padre, dicen mis amigos que lejos de ésta galaxia existe otro planeta en donde también hay vida… dicen que lo habitan unos seres grises, que destrozan la naturaleza, les cuesta amar y que viven en enjambres de barro cocido que se prolongan hacia el cielo, ocultos. Dicen que viven con miedos, aislados. ¿Viven en comunidades para aislarse entre paredes?
¿Es verdad eso, Padre?…¿Es verdad?
Madre, he odio decir que ese ser, llamado humano, ha dejado de tener fe, que pagan por tener agua, que pagan por tener luz y que acumulan y acumulan hasta que se dan cuenta de que no sirve para nada y lo arrojan a los ríos, montes…acabando así con la naturaleza y con todo lo bello que la vida tiene…Se creen que poseer les otorga la felicidad…pero si ya tenemos todo lo que precisamos…
¿Es verdad eso que he oído, madre?…¿Es verdad?
(Gratando) ¿Pero cómo puede ser verdad?
¿Qué podemos hacer?
¿Cómo podemos abrirles los ojos?
(Susurrando) Sí, ya sé, si son como nosotros también han de tener libre albedrio… pero es que se están suicidando…
Sollozando: ¿Qué podemos hacer?
¡Ya sé! Podemos mandarles superhéroes.
Uno vestido con una ropa azul y roja…con capa… que pueda volar… ¡No! demasiado llamativo, no se lo creerían, pensarían que es ficción…
Ya lo tengo… podemos mandar seres especiales, con un don, que tengan la capacidad de hacer que los humanos vuelvan a amar, a amarse, a sentir el amor de la naturaleza, de la vida, de la creación… vamos a mandar niñas y niños enfermitos, los superhéroes y superheroínas que van a conseguir que allá por dónde pasen dejen un halo de amor. Niños y niñas que sean capaces de despertar el lado más humano del ser humano… que hagan que todas las personas saquen la esencia del ser, el ser humano… y que amen… se amen…
Narrador: Y así fue como han venido a nuestro planeta tierra un nuevo tipo de superhéroes y superheroínas. No vienen con capa ni superpoderes, pero tienen el don de generar amor, el auténtico poder sobrenatural de los habitantes del planeta tierra.